Falsa alarma. Similar a “Big Dog” la señal que LIGO observó en septiembre de 2010. Hubo muchos rumores. Hasta marzo de 2011 no se supo la verdad: “blind injection (test)”.
El 14 de marzo de 2011 se convocó en privado a toda la colaboración para preparar el anuncio oficial público de la primera onda gravitacional. Todos, salvo 2 o 3 personas, ignoraban que la señal había sido inyectada el 16 de septiembre de 2010 de forma artificial. La idea era entrenar a los miembros para un futuro anuncio real. En el último minuto de la conferencia se desveló el secreto. Falsa alarma.
En septiembre de 2015, Advanced LIGO inició su toma de datos. Y en septiembre de 2015 se observó una señal. Los rumores (iniciados por Krauss) corrieron como la pólvora. Ahora en enero vuelven a correr los rumores (de nuevo con el marchamo de Krauss). ¿Señal real? ¿Nueva señal ficticia?
En 2010-2011 fueron necesatios 18 meses de análisis para que los rumores se quedaran en “lo siento, falsa alarma”. Este año calculo que se necesitará la mitad de tiempo (unos 9 meses). Luego me atrevo a calcular que este verano sabremos si el cuento de “Pedro y el lobo” se ha vuelto a repetir, o si estamos ante un posible Premio Nobel para 2018.
Saludos